Un militar español ha protagonizado una de las historias más curiosas que recuerden en Ceuta.
Tras perder su pasaporte el fin de semana pasado en Marruecos y tras intentar entrar a España el domingo por la tarde por la frontera del Tarajal -hecho que le fue impedido por los gendarmes marroquíes por carecer de documentación y al no atender a sus explicaciones sobre el extravío de su pasaporte- el soldado decidió adquirir un traje de neopreno con tubos y aletas para cruzar a nado la distancia que separa ambos países.
En plena madrugada del domingo y en su tarea de acceso a nado a territorio nacional, hizo saltar las alarmas cuando las cámaras térmicas del dispositivo de seguridad detectaron un intento de entrada ilegal a nado desde Marruecos.
El dispositivo de seguridad desplazó hasta la zona a una patrullera de la guardia civil, ante la presunción de que algún inmigrante estuviera intentando cruzar la frontera a nado, lo cual suele ser habitual.
Una vez en la zona, los agentes españoles interceptaron a un individuo con traje de neopreno que intentaba alcanzar la costa ceutí.
La sorpresa llegó cuando los guardias civiles comprobaron que no se trataba de un inmigrante ilegal, sino de un ciudadano español, militar de profesión, que desempeña su función en una de las unidades de la Comandancia General de Ceuta.
Una vez a bordo y explicada su situación, el militar fue trasladado a Ceuta, donde se comprobó su identidad y fue puesto en libertad, para así poder presentarse el lunes por la mañana en su puesto de trabajo.
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